Ingeniería industrial: Cómo le ayuda a mejorar la rentabilidad
¿Puede la ingeniería industrial de proceso/producto mejorar la rentabilidad de su empresa? Pues tenemos que decirle que SÍ. Para poder entender mejor esta relación, vamos a definir los conceptos de ingeniería industrial y rentabilidad.
Ingeniería industrial, ¿de qué se encarga?
La ingeniería industrial es la disciplina encargada del diseño, implementación y perfeccionamiento de sistemas integrados por distintos recursos cómo son los materiales, financieros, tecnológicos y humanos.
Lleva a cabo el desarrollo de nuevas ideas (productos/procesos) y da soluciones a necesidades o problemas que surgen en las empresas, mejorando así la calidad del producto/proceso y su productividad.
Es la única rama de la ingeniería capacitada específicamente para esa función.
Cómo la ingeniería industrial mejora la rentabilidad de una empresa
La Rentabilidad es la relación entre la inversión/esfuerzo (económico, humano, etc.) que se ha realizado para desarrollar una determinada idea/producto/proceso, y los beneficios que proporcionan las acciones que se han llevada a cabo con dicha inversión.
Para que una inversión en desarrollo de producto/procesos sea rentable a una empresa necesita de la ingeniería industrial. Esta es la especialista en analizar, interpretar esa idea o necesidad, y desarrollar el proyecto industrial óptimo (inventar, diseñar, fabricar, programar,…) para que le genere el máximo beneficio con el mínimo esfuerzo (ya se trate de dinero, tiempo u otros recursos).
Si nos enfocamos en la rentabilidad de las empresas, o sea en los beneficios versus el esfuerzo/inversión que pueden obtener gracias a la ingeniería industrial, podemos destacar algunos ejemplos evidentes:
Empezando por el área de producción, podemos conseguir estos objetivos:
En el área comercial, la ingeniería industrial atiende las siguientes mejoras:
En el área de diseño obtendremos los siguientes beneficios:
Y en el área de recursos humanos tendremos:
Resumiendo, la ingeniería industrial de producto/proceso da soluciones a problemas o necesidades que plantean las empresas mejorando procesos, productos que ya existen o creándolos desde cero, con el objetivo final de que las empresas sean más competitivas, más innovadoras y con un alto grado de calidad y respuesta con un mínimo esfuerzo/inversión. O sea, consiguiendo la mejor rentabilidad a sus inversiones empresariales.